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Lo que verdaderamente debemos saber.

AUTOR:JUAN DEL SUR.

Una guerra más. Una guerra fácil para el periodismo, porque a Putin o a Zelensky se los puede dar vuelta como una media, pero, ¿quién de estos charlatanes se animó a cuestionar rigurosamente la legitimidad de la invasión de USA a Afganistán?

En fin, todos nos largamos a opinar. También la farándula, y “Crónica” publica una nota* que lo refleja y nos muestra mucha mediocridad… y una sorpresa deslumbrante. Empecemos por las sombras:

"Parece mentira levantarse y ver una noticia así en 2022″, dice Stefi Roitman, quien al parecer estuvo en coma toda su vida y ayer se despertó: ¡pobrecita!, no sabía nada de las guerras en Siria, en Yemen, en el Cuerno de África y nadie le contó que USA se replegó el 30 de agosto pasado luego de asesinar afganos durante ¡veinte! años.

Cinthia Fernández y Malena Guinzburg se desayunaron con la misma noticia: “Parece mentira que sigan existiendo las guerras”, dice una, y la otra la supera: “Primero pandemia, cuarentenas y ahora una guerra”.

Benjamín Vicuña, entre faltas de ortografía, logra balbucear: “Qué Dios ilumine a los líderes mundiales y nos de paz. No volver a lo peor nuestro”. “No volver”, dice: ¿cuándo nos fuimos?

Y Guillermina Valdés, se sorprende: “¡Guerra en el 2022!”.

¿Qué le parece?

Pero estos opinadores no son particularmente ignorantes. Por el contrario, son representativos del nivel de conciencia general: puede constatarse que sus expresiones reciben abundantes muestras de adhesión y simpatía (así nos va).

En cambio, la única opinión lúcida ha recibido una pedrea de insultos. Luli Salazar escribió: “La guerra es cuando personas completamente inocentes mueren por los intereses de otros”.

¡Resplandeciente, iluminador! Si supiéramos esto, si aplicáramos sus corolarios, la vida en la Tierra sería un verdadero paraíso. Por ejemplo, si en el caso de una guerra entre pueblos disparáramos contra nuestros jefes y nos hermanáramos con los soldados “enemigos”, cuánta sangre de prójimos se ahorraría y de cuántos chupasangres nos libraríamos.

Lo admito: si usted opinara así emprendería un camino espinoso. Tan difícil como el de aquellos que se atrevieron a pensar que la Tierra orbitaba alrededor del Sol.

Pero, ya ve…